El 21 de abril de 1975 se recibe la visita del Dr. Hermann Gmeiner en la ciudad de Quetzaltenango, con el fin de evaluar la posibilidad de construir una Aldea Infantil SOS en la localidad. Fueron varias las personas altruistas de origen quetzalteco, quienes contribuyeron a que fuera posible la creación de una Aldea Infantil SOS en la ciudad de Quetzaltenango en beneficio de los niños y niñas que habían perdido el cuidado de su familia.
El 22 de abril de 1975, se creó el Comité Provisional de Aldeas Infantiles SOS en Quetzaltenango, que junto a un grupo de quetzaltecos elaboraron y presentaron el Proyecto de Construcción de la Aldea Infantil SOS. Debido al terremoto del 4 de febrero de 1976, que afectó principalmente a la ciudad capital de Guatemala se propuso iniciar la construcción de la primera Aldea Infantil SOS en San Juan Sacatepéquez, postergando el proceso de una Aldea Infantil SOS en Quetzaltenango.
A pesar de que no fue posible iniciar la construcción, ante la urgencia de brindar una respuesta a varias niñas y niños en situación de desprotección, entre los meses de marzo y abril de 1976, aún estando en gestiones para obtener el terreno, se decidió alquilar una casa e iniciar las labores de Aldeas Infantiles SOS, albergando al inicio a ocho niños en situación de orfandad. Entre los meses de mayo y agosto del mismo año, el número de niños fue aumentando, viéndose en la necesidad de arrendar otra casa.
El 23 junio de 1976 se inician las gestiones ante el Instituto Nacional de la Vivienda, (posteriormente conocido por BANVI) para que cediera un terreno situado en la Colonia Minerva de la Zona 3 en Quetzaltenango, el cual otorgaron en calidad de usufructo por 25 años. En este terreno, el 18 de agosto de 1976 se coloca la primera piedra para iniciar la construcción de Aldeas Infantiles SOS Quetzaltenango.
Actualmente la Aldea Infantil SOS de Quetzaltenango cuenta con un total de 12 casas familiares y dos comunidades juveniles, brindando cuidado y protección a 108 niñas, niños, adolescentes y jóvenes originarios principalmente de Quetzaltenango, Coatepeque, Huehuetenango y San Marcos.
A finales del año 2015, se inició un estudio de factibilidad, que permite actualizar la información sobre la situación de la niñez y adolescencia en la localidad. Una vez concluido y en función de los principales factores de riesgo, se espera poder ampliar los servicios hacia la prevención de la desintegración familiar.